Se trata de algo muy sencillo que todos podemos realizar y con ello obtendremos unos regalos diferentes para dar a los invitados en nuestro gran día.
- Botes de cristal
- Pintura en spray para pintar las tapas
- Trozos de tela cortados en cuadrados. (Su tamaño dependerá del tamaño del bote, en mi caso los corté de 12x12 cm)
- Gomas elásticas para sujetar las tela
- Etiquetas
- Cinta o hilo para amarrar las etiquetas
-Pistola de silicona para pegar las etiquetas a la tapa
- Golosinas
En este caso diseñé dos etiquetas, las rojas para anudarlas por fuera, y las blancas para pegarlas a las tapas. Así una vez que hayan abierto el bote y se hayan comido las chuches el tarro de cristal seguirá siendo un recuerdo de tu boda que podrán reutilizar.
Éste es el resultado con las tapas pintadas a spray y las etiquetas blancas ya pegadas con la pistola de silicona.
Para llenar los botes utilicé nubes y besitos, además de que son dos golosinas que le suele gustar a todo el mundo, sus tonos rosas pasteles en combinación con las telas azules quedó muy bien.
Una vez tengas los botes llenos es hora de colocar la tela. La manera más fácil es utilizar una goma elástica que la sujete bien, así será mucho más sencillo anudar las etiquetas sin necesidad de tener que ajustar mucho el hijo.
¡Y ya está listo!
En El globo de Bea utilizamos muchos botes de cristal, así que no fue difícil hacer frente a este encargo. Si te animas a hacerlo para tu boda, te recomiendo que empieces a reciclar desde ya todos los botes de cristal que pasen por tus manos. Así mismo coméntaselo a tus familiares y amigos para que te ayuden con la recolecta.
Cuando todos los botes están juntos el resultado es muy vistoso, y los invitados agradecerán llevarse a sus casas un regalo diferente. ¡Te animo a intentarlo!
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